Es el mismo problema de siempre. El problema de no saber dónde empiezan las cosas, porque nunca encuentro la punta del rollo de fixo... Es un problema, y no sólo para mi, no saber empezar. No adelantar cuando algo que tienes delante te estorba, no saltar una piedra en el camino. Es un problema no inventar, andar lo andado.
Y es que cuando aun dándote cuenta de algo, no lo solucionas... se queda el cuerpo algo asqueado con uno mismo. Enfadado y resignado al mismo tiempo.
Es un problema no saber cuándo hay que cumplir con el deber, o peor, esquivándolo aunque lo sepa.
Lo siento, post sin sentido.
Y es que cuando aun dándote cuenta de algo, no lo solucionas... se queda el cuerpo algo asqueado con uno mismo. Enfadado y resignado al mismo tiempo.
Es un problema no saber cuándo hay que cumplir con el deber, o peor, esquivándolo aunque lo sepa.
Lo siento, post sin sentido.
1 comentario:
Hay que echarle huevos, sencillamente. No pararse a pensar porque, por mucho que diga la gente, el pensar a veces no resulta del todo conveniente.
En esta vida estamos para equivocarnos; si no te equivocas, si no das el paso, aun sabiendo que "quizás" fracasarás... no vives.
Un abrazo Fran.
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